jueves, 29 de julio de 2010

I love you very much.


Mi vida no sólo va de amores, si no, de amistad. En mi camino, me encontré a mucha gente, que iba diciendo por ahí que éramos amigos, y la verdad, yo perdí la cuenta de todas esas personas. Hasta que llegó ella, mi grandísima amiga. Mi mejor compañera. La que andaba siempre a mi vera, cerca mío, apenas a 2mm de distancia. Era ella. Lo sabía. Apenas con una mirada infantil, se decían tantas aventuras, aquellas que nos quedaban por vivir, y que deseábamos hacerlas, la una con la otra. Recuerdo muy bien, el día en el que la proclamé parte de mi vida. Estábamos juntas, y eran las fiestas de Valencia. Me miró, y me dijo que nunca quería que nos separásemos. Se me iluminaron todos los caminos. Me sentí muy orgullosa. Empecé a sentirme mejor persona. Y dejé de ser tan fría. Empecé a ser cálida como una primavera. Y empecé a quererme a mí misma, y a dejar de ver la vida como si fuera un castigo. Ahora ella es tan imprescindible, tan esencial, tan grande, tan.. tan.. tan.. ! La quiero como una hermana, de esas que en la vida se separan.
Ella ha sido, de momento, mi mejor regalo, y ha dejado de ser parte de mi vida, a serla.

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